Add parallel Print Page Options

Oración en que se pide la ayuda de Dios

(1) Del maestro de coro, con instrumentos de cuerda. Instrucción de David, (2) cuando los habitantes de Zif fueron a decir a Saúl: «¿No se ha escondido David entre nosotros?»

54 (3) ¡Sálvame, Dios mío, por tu nombre!
¡Defiéndeme con tu poder!
(4) Escucha, Dios mío, mi oración;
presta oído a mis palabras,
(5) pues gente arrogante y violenta
se ha puesto en contra mía y quiere matarme.
¡No tienen presente a Dios!
(6) Sin embargo, Dios me ayuda;
el Señor me mantiene con vida.
5-6 (7-8) Él hará que la maldad de mis enemigos
se vuelva contra ellos mismos.

¡Destrúyelos, Señor, pues tú eres fiel!
Yo te ofreceré sacrificios voluntarios
y alabaré tu nombre, porque eres bueno,
(9) porque me has librado de todas mis angustias
y he visto vencidos a mis enemigos.

Ven a defenderme

SALMO 54 (53)

David compuso este poema cuando la gente de Zif fue a decirle a Saúl: «Parece que David se ha escondido entre nosotros». Instrucciones para el director del coro: Este himno deberá cantarse acompañado de instrumentos de cuerda.

54 Dios mío,
ven a salvarme,
ven a defenderme;
haz uso de tu poder,
¡muestra quién eres!
Dios mío,
escucha mi oración;
atiende mis palabras.
Gente extraña y violenta
me ataca y me quiere matar.
¡Esa gente no quiere nada contigo!

4-6 Tú, mi Dios y Señor,
me das tu ayuda y tu apoyo;
harás caer sobre mis enemigos
el mal que quieren hacerme.

¡Destrúyelos, Dios mío,
pues tú eres fiel!
Yo, con mucho gusto,
te presentaré una ofrenda
y alabaré tu bondad,
pues me dejaste ver
la derrota de mis enemigos,
y me libraste de todos mis problemas.