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y logró vencerlo. Luego lloró, y cuando lo encontró en Betel(A) le rogó.(B) Allí él habló con nosotros; habló el Señor y Dios de los ejércitos. Su nombre es el Señor. Por lo tanto, vuélvete a tu Dios, haz misericordia e imparte justicia, y confía siempre en tu Dios.

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