Add parallel Print Page Options

Venid y volvamos a Jehová,
pues él nos destrozó, mas nos curará;
nos hirió, mas nos vendará.
Después de dos días nos hará revivir,
al tercer día nos levantará,
y viviremos delante de él.
Esforcémonos por conocer a Jehová:
cierta como el alba es su salida.
Vendrá a nosotros como la lluvia,
como la lluvia tardía y temprana viene a la tierra.

«¿Qué haré contigo, Efraín?
¿Qué haré contigo, Judá?
Vuestra piedad es como nube matinal,
como el rocío de la madrugada, que se desvanece.
Por eso los he quebrantado mediante los profetas;
con las palabras de mi boca los maté,
y tus juicios brotarán como la luz.
Porque misericordia quiero y no sacrificios,
conocimiento de Dios más que holocaustos.

»Pero ellos, cual Adán, violaron el pacto;
allí han pecado contra mí.
Galaad, ciudad de malhechores,
toda manchada de sangre.
Como ladrones al acecho de un hombre,
así una compañía de sacerdotes
mata y comete infamias
en el camino hacia Siquem.
10 En la casa de Israel he visto cosas horribles:
allí fornicó Efraín
y se contaminó Israel.
11 Para ti también, Judá, está preparada una siega,
cuando yo haga volver el cautiverio de mi pueblo.»

Venid y volvamos a Jehová; porque él arrebató, y nos curará; hirió, y nos vendará. Nos dará vida después de dos días; en el tercer día nos resucitará,(A) y viviremos delante de él. Y conoceremos, y proseguiremos en conocer a Jehová; como el alba está dispuesta su salida, y vendrá a nosotros como la lluvia, como la lluvia tardía y temprana a la tierra.

¿Qué haré a ti, Efraín? ¿Qué haré a ti, oh Judá? La piedad vuestra es como nube de la mañana, y como el rocío de la madrugada, que se desvanece. Por esta causa los corté por medio de los profetas, con las palabras de mi boca los maté; y tus juicios serán como luz que sale. Porque misericordia quiero, y no sacrificio,(B) y conocimiento de Dios más que holocaustos.

Mas ellos, cual Adán, traspasaron el pacto; allí prevaricaron contra mí. Galaad, ciudad de hacedores de iniquidad, manchada de sangre. Y como ladrones que esperan a algún hombre, así una compañía de sacerdotes mata en el camino hacia Siquem; así cometieron abominación. 10 En la casa de Israel he visto inmundicia; allí fornicó Efraín, y se contaminó Israel.

11 Para ti también, oh Judá, está preparada una siega, cuando yo haga volver el cautiverio de mi pueblo.