Add parallel Print Page Options

Haz buen uso de lo que Dios te da

(Lc 19:11-27)

14 »El reino de Dios será como un hombre que se iba de viaje. Antes de irse llamó a sus siervos y los dejó encargados de administrar su fortuna. 15 A uno de ellos le dio 5000 monedas[a], al segundo le dio 2000 y al otro 1000. A cada uno le dio una parte de acuerdo con lo que le era posible tomar a su cargo. Después se fue a su viaje. 16 Inmediatamente, el que había recibido las 5000 monedas comenzó a invertir el dinero y ganó otras 5000. 17 Así mismo, el que recibió 2000 monedas ganó otras 2000. 18 Pero el que recibió 1000 se fue, hizo un hueco en el suelo y escondió el dinero de su patrón.

19 »Después de mucho tiempo, regresó el patrón y empezó a arreglar cuentas con los siervos. 20 El hombre que había recibido las 5000 monedas, se acercó al patrón y trajo 5000 más. Le dijo: “Señor, usted me dejó encargado de 5000 monedas, aquí hay 5000 más que yo gané”. 21 Su patrón le dijo: “¡Muy bien hecho! Eres un buen siervo y digno de confianza. Como fuiste fiel con poca cantidad, te pondré a cargo de mucho. Ven y alégrate con tu patrón”. 22 Después, el hombre que había recibido 2000 monedas se le acercó y le dijo: “Señor, usted me dejó encargado de 2000 monedas, aquí están 2000 más que yo gané”. 23 Su patrón le dijo: “¡Bien hecho! Eres un buen siervo y digno de confianza. Como fuiste fiel con poca cantidad, te pondré a cargo de mucho. Ven y alégrate con tu patrón”.

24 »Entonces el hombre que había recibido 1000 monedas se acercó a su patrón y le dijo: “Señor, yo sé que usted es un hombre duro. Cosecha donde no ha plantado y recoge donde no ha sembrado. 25 Tuve miedo y fui y escondí el dinero en el suelo. Aquí le entrego lo que es suyo”. 26 El patrón le contestó: “¡Eres un siervo malo y perezoso! ¿Conque sabías que cosecho donde no he plantado y recojo donde no he sembrado? 27 Por eso debiste poner mi dinero en un banco. Así cuando yo volviera, tendría mi dinero más los intereses”.

28 »Entonces el patrón les dijo a otros siervos: “Tomen el dinero de ese siervo y dénselo al que tiene 10 000 monedas. 29 Así es, porque el que use bien lo que se le da, recibirá más, aun más de lo que necesita. Pero al que no lo haga, se le quitará todo lo que tiene. 30 Echen a este siervo inútil afuera, a la oscuridad donde la gente llora y cruje los dientes”.

Read full chapter

Footnotes

  1. 25:15 monedas Textualmente talentos. Un talento consistía aproximadamente de 30 a 40 kilos de oro, plata o monedas de cobre.

Parábola de los talentos

14 Porque el reino de los cielos es como un hombre que yéndose lejos, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes. 15 A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad; y luego se fue lejos. 16 Y el que había recibido cinco talentos fue y negoció con ellos, y ganó otros cinco talentos. 17 Asimismo el que había recibido dos, ganó también otros dos. 18 Pero el que había recibido uno fue y cavó en la tierra, y escondió el dinero de su señor. 19 Después de mucho tiempo vino el señor de aquellos siervos, y arregló cuentas con ellos. 20 Y llegando el que había recibido cinco talentos, trajo otros cinco talentos, diciendo: Señor, cinco talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros cinco talentos sobre ellos. 21 Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor. 22 Llegando también el que había recibido dos talentos, dijo: Señor, dos talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros dos talentos sobre ellos. 23 Su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor. 24 Pero llegando también el que había recibido un talento, dijo: Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no sembraste y recoges donde no esparciste; 25 por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo. 26 Respondiendo su señor, le dijo: Siervo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí. 27 Por tanto, debías haber dado mi dinero a los banqueros, y al venir yo, hubiera recibido lo que es mío con los intereses. 28 Quitadle, pues, el talento, y dadlo al que tiene diez talentos. 29 Porque al que tiene, le será dado, y tendrá más; y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.(A) 30 Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.(B)(C)

Read full chapter