³⁰ Ahora, ciertamente te has marchado porque anhelabas mucho la casa de tu padre. Pero ¿por qué robaste mis dioses^(A)?».

³⁴ Raquel había tomado los ídolos domésticos^[a], los había puesto en los aparejos del camello y se había sentado sobre ellos. Y Labán buscó^[b] por toda la tienda, pero no los encontró.

² Y Jacob dijo a los de su casa y a todos los que estaban con él^(A): «Quiten los dioses extranjeros que hay entre ustedes^(B). Purifíquense y cámbiense los vestidos^(C).

⁵ Y este hombre Micaía tenía un santuario^[a](A). Hizo un efod e ídolos domésticos^[b](B), y consagró a^[c] uno de sus hijos para que fuera su sacerdote^(C).

¹³ Entonces Mical tomó el ídolo doméstico^[a](A) y lo puso en la cama, después puso a su cabecera una almohada de pelo de cabra y lo cubrió con ropa.