Add parallel Print Page Options

23 »Esto me pareció bien, por lo que elegí doce espías, uno de cada tribu. 24-25 Los espías cruzaron las colinas y llegaron al valle de Escol, y volvieron con muestras de las frutas que allí se producían. Una sola mirada bastó para convencernos de que la tierra que el Señor nos había dado era una tierra buena.

Read full chapter